lunes, 26 de noviembre de 2012
miércoles, 1 de septiembre de 2010
Mapa del uruguay
Suelos y Regiones de Suelos
Aunque Uruguay es un país pequeño, tiene una amplia variedad de tipos de suelos. La CIDE (1963) ha reconocido cinco grupos de suelos de acuerdo con los tipos predominantes (Figura 3). Estos grupos de suelos difieren grandemente en sus características, su capacidad de uso, los problemas de manejo que presentan y su productividad potencial. El país ha sido dividido en 13 zonas de suelos, desde el punto de vista del manejo y la conservación, por medio de la combinación de factores como la fisiografía y el drenaje, el origen y edad del material madre, lo cual ha determinado la evolución hacia diferentes tipos de suelos con diferentes problemas.
Zonas de Suelos Dominantes del Uruguay
Fuente: CIDE 1966
Zonas De Suelos de Uruguay
En el Grupo I predominan suelos superficiales asociados en variables proporciones con suelos profundos de diferentes características, los cuales determinan en gran medida el potencial de las áreas. En este grupo hay dos zonas: una con litosoles y vertisoles pelicos, desarrollados sobre rocas basálticas; esta área ocupa 21,2 por ciento del país. Los suelos superficiales tienen baja capacidad para conservar agua, alto riesgo de sequía, áreas con piedras y alta fijación de fósforo. El relieve es plano a suavemente ondulado. En la otra zona los suelos predominantes son litosoles y faeozems lúvicos, desarrollados sobre rocas ígneas, metamórficas y rocas efusivas [lava]; son el 11,2 por ciento del área. El relieve es ondulado a escarpado y empinadamente fraccionado a montañoso (8 por ciento a más de 30 por ciento).
En el Grupo II predominan suelos profundos, de textura media, drenaje pobre y fertilidad baja a media. Este grupo tiene una zona única con planosoles eútricos, de textura media, asociados con solonetz órticos; ocupa el 5 por ciento del área del país y es una larga planicie con muy baja pendiente. Son suelos con materia orgánica y fertilidad bajas y humedad alta.
El Grupo III incluye suelos profundos, de textura media, con permeabilidad baja y fertilidad media a baja. En general, las rocas ígneas, ácidas y sedimentarias de granulometría media con bajo nivel de calcáreo, tienden a desarrollar bajo condiciones climáticas corrientes, con topografía ondulada a suavemente ondulada, suelos de textura media con subsuelo pesado y fuertemente estructurado, con periodos de saturación de humedad y periodos en los cuales se ponen muy duros cuando están secos. Tres zonas de suelos con diferentes aptitudes y problemas de manejo pueden distinguirse en este grupo. En una de las zonas, la cual ocupa el 8 por ciento del total del área del país, predominan faeozems lúvicos de textura media con planosoles éutricos y mólicos. La segunda zona ocupa 15,5 por ciento, con faeozems lúvicos de textura fina, gleysoles mólicos y vertisoles pélicos y litosoles asociados como intrusiones; el relieve es plano a ondulado. En la tercer zona predominan faeozems lúvicos de textura fina con vertisoles pélicos y planosoles mólicos asociados; el relieve es plano a ondulado y el área cubre un 5 por ciento. Los principales problemas de estos suelos son el riesgo de sequía alto, susceptibilidad a la erosión, contenido de materia orgánica bajo a medio y fertilidad media.
Los suelos del Grupo IV son profundos, de textura fina y fertilidad baja. Materiales sedimentarios de textura gruesa con bajo nivel de calcáreo tienden a desarrollar en el Uruguay, suelos de textura liviana con horizonte superficial generalmente profundo y con subsuelo pesado, con colores oscilando desde rojo oscuro a gris oscuro, pasando por amarillos y rojos oscuros claros. Son los suelos más lixiviados del país. En este grupo también se distinguen tres zonas: una que ocupa el 3,4 por ciento del área con luvisoles órticos de textura media, y faeozems lúvicos y luvisoles crómicos asociados. En la segunda zona predominan faeozems lúvicos de textura media, con luvisoles órticos y planosoles mólicos asociados; ocupan el 4,5 por ciento del área. En la tercer zona con un área de 7,1 por ciento, predominan vertisoles pélicos de textura fina con faeozems lúvicos y planosoles mólicos. El relieve de las tres zonas es plano a ondeado. Los principales problemas de estos suelos son su predisposición a la erosión hídrica y eólica, lixiviación fácil, contenido de materia orgánica y fertilidad bajos, y la presencia de Al+++ intercambiable, mayormente en la primer zona de este grupo.
El Grupo V abarca los suelos de mayor potencial del país. Estos suelos son profundos, de textura pesada con permeabilidad lenta a moderada y fertilidad alta a media. En las condiciones climáticas corrientes, las rocas ígneas básicas y las sedimentarias de textura fina, tienden a formar suelos negros, de textura pesada, con permeabilidad lenta a muy lenta. Los sedimentos son de textura media a fina, con buen nivel de carbonatos, y en general generan suelos de textura media a pesada, con subsuelos pesados y drenaje moderadamente bueno. En este grupo se pueden separar cuatro zonas: una con predominancia de vertisoles pélicos de textura fina, con faeozems lúvicos y planosoles mólicos, con un área de 5,5 por ciento. Una segunda con faeozems lúvicos de textura fina, y faeozems háplicos asociados cubriendo 3,9 del área. La tercera con vertisoles pélicos de textura fina, con faeozems lúvicos y litosoles, con un área de 5,2 por ciento. La última cubre el 2,2 por ciento del país, en la cual predominan faeozems lúvicos, y están asociados vertisoles pélicos y planosoles mólicos. En las cuatro zonas la pendiente varía de cero a 8 por ciento, o sea de plano a ondeado. El principal problema de estas zonas es la pérdida de gran parte del horizonte superficial por efecto del laboreo y la erosión; en algunas zonas es frecuente el piso de arado. (Clasificación de suelos y nomenclatura de FAO-UNESCO, 1971).
Aunque Uruguay es un país pequeño, tiene una amplia variedad de tipos de suelos. La CIDE (1963) ha reconocido cinco grupos de suelos de acuerdo con los tipos predominantes (Figura 3). Estos grupos de suelos difieren grandemente en sus características, su capacidad de uso, los problemas de manejo que presentan y su productividad potencial. El país ha sido dividido en 13 zonas de suelos, desde el punto de vista del manejo y la conservación, por medio de la combinación de factores como la fisiografía y el drenaje, el origen y edad del material madre, lo cual ha determinado la evolución hacia diferentes tipos de suelos con diferentes problemas.
Zonas de Suelos Dominantes del Uruguay
Fuente: CIDE 1966
Zonas De Suelos de Uruguay
En el Grupo I predominan suelos superficiales asociados en variables proporciones con suelos profundos de diferentes características, los cuales determinan en gran medida el potencial de las áreas. En este grupo hay dos zonas: una con litosoles y vertisoles pelicos, desarrollados sobre rocas basálticas; esta área ocupa 21,2 por ciento del país. Los suelos superficiales tienen baja capacidad para conservar agua, alto riesgo de sequía, áreas con piedras y alta fijación de fósforo. El relieve es plano a suavemente ondulado. En la otra zona los suelos predominantes son litosoles y faeozems lúvicos, desarrollados sobre rocas ígneas, metamórficas y rocas efusivas [lava]; son el 11,2 por ciento del área. El relieve es ondulado a escarpado y empinadamente fraccionado a montañoso (8 por ciento a más de 30 por ciento).
En el Grupo II predominan suelos profundos, de textura media, drenaje pobre y fertilidad baja a media. Este grupo tiene una zona única con planosoles eútricos, de textura media, asociados con solonetz órticos; ocupa el 5 por ciento del área del país y es una larga planicie con muy baja pendiente. Son suelos con materia orgánica y fertilidad bajas y humedad alta.
El Grupo III incluye suelos profundos, de textura media, con permeabilidad baja y fertilidad media a baja. En general, las rocas ígneas, ácidas y sedimentarias de granulometría media con bajo nivel de calcáreo, tienden a desarrollar bajo condiciones climáticas corrientes, con topografía ondulada a suavemente ondulada, suelos de textura media con subsuelo pesado y fuertemente estructurado, con periodos de saturación de humedad y periodos en los cuales se ponen muy duros cuando están secos. Tres zonas de suelos con diferentes aptitudes y problemas de manejo pueden distinguirse en este grupo. En una de las zonas, la cual ocupa el 8 por ciento del total del área del país, predominan faeozems lúvicos de textura media con planosoles éutricos y mólicos. La segunda zona ocupa 15,5 por ciento, con faeozems lúvicos de textura fina, gleysoles mólicos y vertisoles pélicos y litosoles asociados como intrusiones; el relieve es plano a ondulado. En la tercer zona predominan faeozems lúvicos de textura fina con vertisoles pélicos y planosoles mólicos asociados; el relieve es plano a ondulado y el área cubre un 5 por ciento. Los principales problemas de estos suelos son el riesgo de sequía alto, susceptibilidad a la erosión, contenido de materia orgánica bajo a medio y fertilidad media.
Los suelos del Grupo IV son profundos, de textura fina y fertilidad baja. Materiales sedimentarios de textura gruesa con bajo nivel de calcáreo tienden a desarrollar en el Uruguay, suelos de textura liviana con horizonte superficial generalmente profundo y con subsuelo pesado, con colores oscilando desde rojo oscuro a gris oscuro, pasando por amarillos y rojos oscuros claros. Son los suelos más lixiviados del país. En este grupo también se distinguen tres zonas: una que ocupa el 3,4 por ciento del área con luvisoles órticos de textura media, y faeozems lúvicos y luvisoles crómicos asociados. En la segunda zona predominan faeozems lúvicos de textura media, con luvisoles órticos y planosoles mólicos asociados; ocupan el 4,5 por ciento del área. En la tercer zona con un área de 7,1 por ciento, predominan vertisoles pélicos de textura fina con faeozems lúvicos y planosoles mólicos. El relieve de las tres zonas es plano a ondeado. Los principales problemas de estos suelos son su predisposición a la erosión hídrica y eólica, lixiviación fácil, contenido de materia orgánica y fertilidad bajos, y la presencia de Al+++ intercambiable, mayormente en la primer zona de este grupo.
El Grupo V abarca los suelos de mayor potencial del país. Estos suelos son profundos, de textura pesada con permeabilidad lenta a moderada y fertilidad alta a media. En las condiciones climáticas corrientes, las rocas ígneas básicas y las sedimentarias de textura fina, tienden a formar suelos negros, de textura pesada, con permeabilidad lenta a muy lenta. Los sedimentos son de textura media a fina, con buen nivel de carbonatos, y en general generan suelos de textura media a pesada, con subsuelos pesados y drenaje moderadamente bueno. En este grupo se pueden separar cuatro zonas: una con predominancia de vertisoles pélicos de textura fina, con faeozems lúvicos y planosoles mólicos, con un área de 5,5 por ciento. Una segunda con faeozems lúvicos de textura fina, y faeozems háplicos asociados cubriendo 3,9 del área. La tercera con vertisoles pélicos de textura fina, con faeozems lúvicos y litosoles, con un área de 5,2 por ciento. La última cubre el 2,2 por ciento del país, en la cual predominan faeozems lúvicos, y están asociados vertisoles pélicos y planosoles mólicos. En las cuatro zonas la pendiente varía de cero a 8 por ciento, o sea de plano a ondeado. El principal problema de estas zonas es la pérdida de gran parte del horizonte superficial por efecto del laboreo y la erosión; en algunas zonas es frecuente el piso de arado. (Clasificación de suelos y nomenclatura de FAO-UNESCO, 1971).
ACTIVIDADES PARA REALIZAR
ACTIVIDAD
(SACANDO DEL BLOG)
1) ¿Qué es el suelo del Uruguay?
2) ¿Cómo está compuesto el suelo?
3) ¿Qué es la erosión del suelo?
(SACANDO DEL BLOG)
1) ¿Qué es el suelo del Uruguay?
2) ¿Cómo está compuesto el suelo?
3) ¿Qué es la erosión del suelo?
¿Podemos mejorar las propiedades del suelo?
Si le aportan materia orgánica a tierra arenosa o arcillosa mejoramos la fertilidad de estos suelos. Bajo la acción de los microorganismos existentes en la tierra, la materia orgánica se va descomponiendo con el paso del tiempo liberando elementos nutritivos, que serán absorbidos por las plantas. También, de esta manera, se mejora la retención de agua. Los abonos orgánicos como el estiércol animal y los residuos vegetales, son las principales fuentes de materia orgánica.
La erosión del suelo
La erosión es provocada por el viento, y por el agua de la lluvia que corre por las pendientes del terreno arrastrando la capa superior del suelo que es la que posee la mayor concentración de nutrientes, disminuyendo año tras año la fertilidad de las tierras. El hombre con sus prácticas agrícolas debe hacer los mayores esfuerzos para conservar las propiedades de los suelos recuperándolo de los daños producidos por la erosión.
Si le aportan materia orgánica a tierra arenosa o arcillosa mejoramos la fertilidad de estos suelos. Bajo la acción de los microorganismos existentes en la tierra, la materia orgánica se va descomponiendo con el paso del tiempo liberando elementos nutritivos, que serán absorbidos por las plantas. También, de esta manera, se mejora la retención de agua. Los abonos orgánicos como el estiércol animal y los residuos vegetales, son las principales fuentes de materia orgánica.
La erosión del suelo
La erosión es provocada por el viento, y por el agua de la lluvia que corre por las pendientes del terreno arrastrando la capa superior del suelo que es la que posee la mayor concentración de nutrientes, disminuyendo año tras año la fertilidad de las tierras. El hombre con sus prácticas agrícolas debe hacer los mayores esfuerzos para conservar las propiedades de los suelos recuperándolo de los daños producidos por la erosión.
lunes, 30 de agosto de 2010
¿QUÉ ES EL SUELO?
La capa superficial, de la corteza terrestre o litósfera, con fertilidad y profundidad variable.Donde es posible la vida vegetal y animal, permitiendo la actividad económica del hombre ligadas al sector agrupecuario.
El suelo, está formado por rocas las cuales han sido erosionadas por agentes externo, a lo que se suma la acción del hombre. alterándolo y transformándolo
¿QUÉ ELEMENTOS COMPONEN EL SUELO?
Existen cuatro componentes fundamentales:
A. Minerales, que provienen de la alteración de las rocas, por efecto del clima a lo largo del tiempo. Estos están compuestos por piedras de distintos tamaños, gravas, gravillas y partículas cada vez menores, desde la arena hasta la arcilla.
B. Materia orgánica, que proviene de la descomposición de restos animales y vegetales.
C. Agua, elemento indispensable para la vida de las plantas. Los vegetales la absorben por las raíces junto con las sales disueltas en ella.
D. Aire, fundamental para la respiración de las raíces de las plantas, de las bacterias y de los microorganismos descomponedores de materia orgánica que habitan en el suelo.
¿Cómo se distinguen los distintos tipos de suelos?
Por el color: el humus o materia orgánica le dan a la tierra el color negro, el hierro de coloraciones rojizas, pardas o amarillentas, minerales como él calcáreo o el yeso le aportan al suelo un color blancuzco.
Por la textura: que nos informa sobre la proporción en que se encuentran los minerales: arena, hierro o arcilla. De esta manera tendremos texturas arenosas, texturas limosas o texturas arcillosas. La textura arenosa posee alta capacidad de infiltración de agua. (suelo permeable bien aireado). Estos suelos no tienen buena capacidad de retención del agua y no son muy fértiles. La textura arcillosa presenta problemas de infiltración de agua y permeabilidad, son suelos de drenaje pobre y poseen mala aireación, pero tienen buena retención de agua y su fertilidad es alta.
A. Minerales, que provienen de la alteración de las rocas, por efecto del clima a lo largo del tiempo. Estos están compuestos por piedras de distintos tamaños, gravas, gravillas y partículas cada vez menores, desde la arena hasta la arcilla.
B. Materia orgánica, que proviene de la descomposición de restos animales y vegetales.
C. Agua, elemento indispensable para la vida de las plantas. Los vegetales la absorben por las raíces junto con las sales disueltas en ella.
D. Aire, fundamental para la respiración de las raíces de las plantas, de las bacterias y de los microorganismos descomponedores de materia orgánica que habitan en el suelo.
¿Cómo se distinguen los distintos tipos de suelos?
Por el color: el humus o materia orgánica le dan a la tierra el color negro, el hierro de coloraciones rojizas, pardas o amarillentas, minerales como él calcáreo o el yeso le aportan al suelo un color blancuzco.
Por la textura: que nos informa sobre la proporción en que se encuentran los minerales: arena, hierro o arcilla. De esta manera tendremos texturas arenosas, texturas limosas o texturas arcillosas. La textura arenosa posee alta capacidad de infiltración de agua. (suelo permeable bien aireado). Estos suelos no tienen buena capacidad de retención del agua y no son muy fértiles. La textura arcillosa presenta problemas de infiltración de agua y permeabilidad, son suelos de drenaje pobre y poseen mala aireación, pero tienen buena retención de agua y su fertilidad es alta.
¿QUÉ ES EL PERFIL DEL SUELO?
el suelo se representa, en tres capas como por ejemplo: TRES CAPAS FUNDAMENTALES
Un Suelo maduro o bien formado presenta tres horizontes o capas fundamentales.
• Una capa suprior (horizonte A), en contacto con la atmósfera, con la presencia de una cubierta de humus vegetal, rica en materia orgánica y microorganismos.
• Una capa intermedia sometida a la acción del agua infiltrada, que arrastra parte de los componentes de la capa superior (a la que altera), donde se observa roca en descomposición (horizonte B).
• Una capa inferior, esencialmente mineral, en contacto con el subsuelo o la “roca madre”, que lo forma. Representa el primer estado de descomposición de la roca
TIPOS DEL SUELOS
Los suelos no presentan la misma composición: difieren unos de otros, a veces profundamente.
Precisamente, las expresiones “suelos fértiles”, “suelos pobres”, “buenos suelos” establecen diferencias respecto de la capacidad agrícola de éstos, que es la que más le importa al hombre.
Y en ese aspecto, el cloro del suelo es un buen indicador.
Suelos negros y pardos oscuros: son los más fértiles por su alto contenido de humus, ya que, en general, el color oscuro se asocia con una adecuada composición y estructura. Sin embargo, puede ocurrir que el color negro se deba a la presencia de altos porcentajes de un determinado mineral o un deficiente desagüe en regiones húmedas, pero son expresiones, no son los típicos suelos negros.
Suelos rojos o pardos rojizos: son menos fértiles que los anteriores, pero con muy buena amplitud para la actividad agrícola. El color rojo señala la presencia de compuestos de hierro en zonas de buen desagüe
.
Un Suelo maduro o bien formado presenta tres horizontes o capas fundamentales.
• Una capa suprior (horizonte A), en contacto con la atmósfera, con la presencia de una cubierta de humus vegetal, rica en materia orgánica y microorganismos.
• Una capa intermedia sometida a la acción del agua infiltrada, que arrastra parte de los componentes de la capa superior (a la que altera), donde se observa roca en descomposición (horizonte B).
• Una capa inferior, esencialmente mineral, en contacto con el subsuelo o la “roca madre”, que lo forma. Representa el primer estado de descomposición de la roca
TIPOS DEL SUELOS
Los suelos no presentan la misma composición: difieren unos de otros, a veces profundamente.
Precisamente, las expresiones “suelos fértiles”, “suelos pobres”, “buenos suelos” establecen diferencias respecto de la capacidad agrícola de éstos, que es la que más le importa al hombre.
Y en ese aspecto, el cloro del suelo es un buen indicador.
Suelos negros y pardos oscuros: son los más fértiles por su alto contenido de humus, ya que, en general, el color oscuro se asocia con una adecuada composición y estructura. Sin embargo, puede ocurrir que el color negro se deba a la presencia de altos porcentajes de un determinado mineral o un deficiente desagüe en regiones húmedas, pero son expresiones, no son los típicos suelos negros.
Suelos rojos o pardos rojizos: son menos fértiles que los anteriores, pero con muy buena amplitud para la actividad agrícola. El color rojo señala la presencia de compuestos de hierro en zonas de buen desagüe
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